New York, New York con Adrián

Viaje el año pasado a Nueva York con Viajes Famara y la experiencia fue increíble.

Nadie debería perderse las vistas desde Rockefeller Center, incluso me atrevo a decir que mejores que las del Empire Street, ya que desde Rockefeller puedes ver todo Manhattan con el agua a los lados, en el centro el edificio del Empire y luego por la parte trasera de esas vistas ver la inmensidad del Central Park.

También queríamos ir a un sitio a poder tomar una copa o una cerveza algo distinto y conocimos en la calle Norlfolk un garito como clandestino. Como cuando estaba vigente lo de la Ley Seca, fue curioso, las cervezas nos las daban envueltas en papel, las copas en tazas de café y lo mejor el acceso por unos bajos de la misma calle a la altura del 112.

A mi amigo se le ocurrió la gran idea de ir al puente de Brooklin un poco antes del anochecer, lo mejor de todo es que pudimos ver la imagen de la ciudad de Nueva York (skyline) tanto de día como de noche, una verdadera pasada poder aprovechar esas vistas con dos tonos de luz.

Puente de Brooklyn

Las comidas rápidas es lo que se lleva, conocimos una hamburguesería Shake Shac frente al hotel Row y muy cerca de la estación de autobuses.

La excursión de Contrastes de Nueva York que también contratamos por la agencia fue una de las experiencias ya que te ponen al día en unas 4 horas de todo lo que puedes ver bien.  La reservamos el tercer día, pero la reservaría el primer día que tuviera tiempo para así situarnos bien en toda la ciudad.

De compras fuimos al centro comercial de Jersey Garden, a una media hora dirección el aeropuerto de Newark. Desde la estación de autobuses salen dos buses cada media hora, para hacer compras es ideal.

Moverte en taxi es superbarato y vas viendo la ciudad mejor que por el metro. El barrio chino y el barrio italiano que están muy cerca son dignos de ver y poder cenar o comer algo por allí. En resumen, es una ciudad de la que sin duda me quedé con muchas ganas de volver.